Comparto contigo un fragmento del libro de Ann Gillanders, Manual completo de Reflexología. Un poco de historia de esta técnica milenaria:
Existen datos que indican que la reflexología se practicaba en épocas remotas, en muchas culturas del mundo. Aunque no es posible establecer que relación tenía la reflexología tal como la entendían los egipcios hace 4.000 años con la práctica que actualmente conocemos, está demostrado que los antiguos egipcios aplicaban muchas y diversas técnicas de sanación.
En el inmenso lugar de enterramientos egipcio de Saqqara se encuentra una célebre pintura mural que se remonta al año 2330 a.de. C. A esta tumba se le suele llamar “la tumba del médico”, pues en esta pintura suya aparecen dos figuras que aplican a sendos pacientes lo que es claramente un tipo de reflexología. Uno de los practicantes trata los pies de su paciente mientras que el otro está trabajando las manos del suyo. Según la traducción de los antiguos jeroglíficos que acompañan a las figuras , uno de los pacientes está diciendo: “No me hagas daño”, mientras que uno de los practicantes responde : “Lo haré de modo que me alabes”.
En la pintura se muestra al practicante que trabaja sobre los pies del paciente, sentado de tal modo que da la espalda a este. Esta postura serviría para evitar la humillación que supondría que una persona pusiera los pies ante la cara de otra. En la pintura se ve también que ambos pacientes tienen la mano metida bajo la axila. Se creía que durante la sesión se liberaba energía del cuerpo , y que poniendo una mano bajo la axila la energía volvería a entrar en el cuerpo en vez de perderse. Se consideraba que la pérdida de energía vital producía un debilitamiento del sistema.
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