Una de las Terapias Naturales con más proyección de futuro es, sin duda,  la Reflexología Podal. Se trata de una técnica milenaria que activa los procesos curativos del propio cuerpo. Está basada en el principio de que hay zonas reflejas en los pies que  se corresponden con órganos, glándulas y partes del cuerpo. Consiste en presionar y masajear  las diferentes partes del pie,  ya que en ellas están ubicados todos órganos del cuerpo, con el fin de aliviar, mejorar y restablecer el equilibrio homeostático del organismo, es decir el “equilibrio perfecto”.

Estamos ante una terapia natural que estimula al organismo para que éste realice su propio proceso de curación.

Puede aplicarse como complemento de cualquier otra terapia que la persona  esté recibiendo, con lo cual, no reemplaza al cuidado médico o psicológico.

La Reflexología nos ofrece múltiples beneficios, entre ellos uno de los más importantes sería el alivio del estrés y la tensión, así como su actuación sobre todos nuestros sistemas ( nervioso, digestivo, urinario , respiratorio y endocrino…). Además fortalece el sistema inmunológico , ya que normaliza  glándulas y hormonas.

También colaborará en regular el  sueño,  al segregar melatonina influiremos  de esta forma muy positivamente en la coordinación del  ritmo biológico o  circadiano del organismo (regulado por el hipotálamo, una región localizada en el encéfalo ).

Uno de los campos donde la Reflexología es una terapia única es sin duda en el manejo del estrés. Hay que tener en cuenta que el 95 % de las enfermedades hoy en día están relacionadas con el estrés crónico. Esta situación en el momento que se cronifica produce en el cuerpo una serie de cambios químicos y hormonales que la Reflexología ayudará a regular, despertando el  médico interno, nuestra capacidad autocurativa 

En casos de dolor, la Reflexología ofrece un remedio eficaz, que, a diferencia de otras terapias más agresivas, no produce adicción ni efectos secundarios.

Durante el proceso terapéutico, se realizan en el organismo múltiples cambios químicos. Uno de ellos está íntimamente ligado a la sedación del dolor: la reflexología estimula al cerebro para que este produzca su propio analgésico. El hipotálamo a través de sus mensajeros químicos estimula a la glándula pituitaria para que segregue endorfinas, las cuales son cinco o diez veces más poderosas que la morfina. Las endorfinas pueden inhibir la transmisión de las señales dolorosas a través de la médula espinal.

Si quieres conocer como la Reflexología puede ayudarte no dudes en concertar una cita en Boecillo o en Valladolid centro ( junto al Museo de Escultura), estoy segura que te sorprenderá todo lo que esta gran técnica puede hacer por ti.